Aislamiento de suelo radiante, instalación sobre placas de poliestireno expandido.
Calefactar viviendas con suelo radiante.
Se trata de introducir calor en el suelo y dejar que la radiación ambiente las casas.
La versión moderna es instalar en el solado y sobre placas de poliestireno expandido, tubos de polietileno reticulado. Los tubos se colocan de 3 a 5 cms., por debajo de la superficie, con una separación de 10 a 30 cms., entre ellos.
Haciendo circular por los tubos agua entre 35 y 45o C, el suelo se mantiene entre 20 y 28o C y el ambiente entre 18 y 22o C. El grado de confort que se consigue con este tipo de calor es ideal. Pensándolo bien, calentamos agua a 40o C para mantener la casa a 20o C. Con los sistemas tradicionales quemamos combustible a temperaturas superiores a 800o C, para calentar agua a 70 y 80o C y mantener la casa a 20o C. Es obvio que los saltos térmicos son mucho más altos y, de esto, resultan pérdidas de calor mayores.
El calor aportado por el suelo radiante es uniforme en toda la vivienda. Una importante condición para el confort humano es que, entre el punto más caliente y más frío de la casa, no haya una diferencia de temperatura superior a 5o C.
El calor viene del suelo (muy importante en casa con niños pequeños) y llega hasta una altura de 2 a 3 m., justo donde se necesita. Esto nos da un confort a 18o C, temperatura ambiente, idéntico a 20o C con sistema convencional. Cada grado de diferencia en la temperatura de la casa significa un ahorro del 6 al 8 % en gasto de calefacción.
Ventajas del suelo radiante :
ESTETICA:
No hay aparatos de calefacción en la casa (radiadores, fan-coils….), resultando la decoración muy beneficiada.
SALUDABLE:
El agradable y uniforme calor de la vivienda y el suelo asegura un ambiente sano y limpio, sin acumulación del polvillo quemado, sin turbulencias de aire y sin resecar el ambiente.
Por esto, el suelo radiante esta especialmente recomendado para guarderías, hospitales, residencias de ancianos, etc.
AISLAMIENTO:
El montaje del suelo radiante se realiza mediante la construcción o rehabilitación de la vivienda. Una vez levantada la tabiquería, terminadas las instalaciones de fontanería y electricidad y lucidas las paredes. En la instalación se aporta un aislamiento adicional al edificio debido a la instalación de las tuberías encima de las placas de poliestireno expandido, que mejora notablemente los parámetros del aislamiento térmico y acústico del mismo. Esto contribuye a conseguir mayor confort y economía reduciendo costes de mantenimiento.
BAJO MANTENIMIENTO:
El tubo de polietileno reticulado es prácticamente indestructible, tampoco es atacado por la corrosión. La dilatación térmica del tubo no perjudica al pavimento.